Babahoyo, 7 de mayo de 2019.- El 26 de noviembre 2018 el pasillo ecuatoriano ingresó a la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial del Ecuador, mediante Acuerdo Ministerial Nro. DM-2018-225 firmando por el Ministro de Cultura y Patrimonio, Raúl Pérez Torres.

A partir de este registro, a nivel nacional se están realizando varios talleres con la finalidad de establecer líneas de acción para la construcción del Plan de salvaguardia, como un conjunto de acciones o medidas tomadas desde las comunidades o grupos portadores encaminadas a garantizar la continuidad y vigencia del patrimonio cultural inmaterial propendiendo a que sea practicado por las generaciones actuales y venideras.

Los ejes en los que se están trabajando son: dinamización, revitalización y transmisión; comunicación y difusión;  promoción, fomento y protección; y memoria social.

En este contexto, el lunes 6 de mayo, a las 10:00, en el Museo Municipal de Babahoyo, la Zonal 5 del Instituto Nacional de Patrimonio Cultural en conjunto con el GAD Municipal de dicha ciudad realizaron el “Taller participativo para elaborar el plan de salvaguardia del pasillo ecuatoriano”.

En el evento se reunieron investigadores, músicos, gestores culturales e intérpretes de la provincia de Los Ríos, quienes aportaron con información para elaborar este documento; además, lograron identificar a los actores territoriales de esta manifestación patrimonial.

Como resultado se definieron algunos acuerdos entre los que se destacan: realizar otro taller e involucrar a más personas relacionadas con este patrimonio cultural inmaterial, para poder crear estrategias de acción y vinculación entre los distintos actores sociales, además de revitalizar espacios de la memoria social y promover la articulación de la formación educativa con componente patrimonial.

El Pasillo es el género musical ecuatoriano por excelencia. Se canta en todas las regiones y estratos sociales, y forma parte del acervo de la identidad nacional. Es la semilla que da el origen a las manifestaciones sentimentales del cholo costeño, el montuvio y el citadino a lo largo de todo el país. Es una herramienta con la cual se pone de manifiesto el sentimiento general del ser humano, su amor, su dolor y su melancolía, razones de sobra por las cuales el Instituto Nacional de Patrimonio Cultural está actualmente impulsando su inclusión en la Lista Representativa de Patrimonio Cultural de la Humanidad.

Comunicación Social INPC.